El Govern está buscando la fórmula jurídica que le permita poner en marcha el próximo año un registro o banco de ADN con el que identificar y poner en contacto a familias que buscan a bebés robados nada más nacer después de que se les informara de que habían fallecido durante el parto. Sólo en Baleaers hay constancia de unos 300 casos que responderían a este perfil.